Descripción
Con su estrecha silueta el Puntiagudo es una montaña ligada estrechamente a la historia del andinismo en Chile y de la propia región. Con un trágico primer ascenso y una escalada con aires de Patagonia, es el Matterhorn Chileno una de esas ascensiones que se transforman en memorables relatos.
El espectacular volcán está flanqueado por el tupido bosque valdiviano, que en sus alrededores destaca por sus renovales de alerce y mañios, gigantes helechos, tepas, ulmos y quilas. Fauna típica de estos bosques incluye pumas, pudúes, zorros, chingues y picaflores, entre otros esquivos habitantes. El volcán es visible desde la mayoría de los lagos de la región, siendo el Rupanco el que más se asocia al Puntiagudo y su entorno, es por aquí por donde iniciaremos nuestra aproximación.
El Puntiagudo es una montaña técnicamente interesante. En primer lugar, cuenta con una larga aproximación que se inicia a una altitud media de 200m y por la que se deben cruzar densos bosques, en los que es común perder el sendero. En cuanto a las condiciones de la ruta de ascensión estas varían notoriamente a lo largo del año, siendo la temporada invernal idónea para su ascenso al estar cubierto de nieve desde su base, entregándonos una escalada sostenida con interesantes formaciones de hielo en su parte superior: coliflores, cascadas y canaletas.
Está graduada con una dificultad UIAA «D III»: ruta con importante acercamiento y con escalada mantenida en hielo o nieve – AI3 500m, 50º/90º.